el café con teclas
Archie ahora vive en mi clóset
Un día, cuando tenía como 12 años, descubrí en el cuarto de mi hermano un baúl lleno de libritos de tiras cómicas Archie. ¡Los amé!
Me los leí todos, y poco a poco me adueñé de ellos y los fui trasladando de contrabando a mi cuarto, donde los releí montones de veces a lo largo de los años. ¿Cómo olvidar a esos personajes? A Betty, que mataba por Archie, pero él solo tenía ojos para Verónica. La lealtad de Jughead y el creído de Reggie. ¡Qué buenos recuerdos!
Aunque todavía tengo algunos guardados, ya no me entretienen (lógico; ya no tengo 12 años). Pero mi gusto se mantiene fiel con esta divertida cartera que me regalaron hace poco mis queridas amigas.