Siempre me gusta buscar cosas bonitas y diferentes. Algo especial, con algún significado. Pero esta vez, este collar me encontró a mí, a través de mi sobrina querida, en la boutique de Nikki Beach en Marbella.

«Esto es taaan tú; ¡tienes que comprártelo!», me dijo. Le eché solo un vistazo a la prenda de colores que tenía en su mano, y le dije «¡Ok!», porque acertó. Es totalmente yo.

Es un collar largo; la mitad tiene canutillos de colores ensartados, y la otra mitad era una cadena dorada, bañada en oro (ahora que llegué a Panamá, llevé el collar a la joyería y reemplacé esa cadena por una de oro de verdad).

Pero lo más lindo es el dije que guinda de él, con estas hermosas palabras grabadas en español de un lado, e inglés del otro. «Es hora de amar, cantar, reír, abrazar, besar, de decir la verdad, hacer la paz, ser verde, agradecer».

Siempre es un buen momento para hacer todas esas cosas, pero siento que en mi caso, esta hora es la mejor.